REFERENCIA BÍBLICA
Proverbios 18.10
OBJETIVO DE LA LECCIÓN
Enseñar a los niños que en Dios estamos seguros.
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR
“El nombre del Señor es como una torre firme; los justos corren a él y
quedan a salvo.” (Proverbios 18.10)
INTRODUCCIÓN
Educadora, busque en interne figuras de murallas y de castillos
antiguos. Presente las imágenes a los niños y explique que en la antigüedad los
reyes construyeron castillos y murallas, y formaban grandes ejércitos para
defenderse de los ataques de los enemigos.
Concluya explicando que hasta los días de hoy, las naciones buscan estar
protegidas y su pueblo libre de la guerra y de los males. La Biblia nos enseña
que aquel que desea la seguridad y la protección, debemos confiar y temer a
Dios. ¿Quieren saber cómo? Vamos aprender con la historia de hoy. ¡Comience el
estudio!
PROTEGIDO POR DIOS
NIÑOS, CUANDO ustedes se dan cuenta que alguna cosa no está bien
o cuando están entristecidos, desean estar próximos de alguien en quien puedan
confiar, ¿No es cierto? Se aproximan de sus padres a espera de protección. ¿En
estos momentos lo que ustedes hacen? (Espere la participación de ellos). Los
padres siempre buscan proteger y orientar a los hijos. Pero, por más que los
padres den, no pueden estar el tiempo todo con los hijos, ¿No es verdad? La
Biblia nos enseña que solamente en Dios estamos totalmente seguros. Él nos
protege hasta cuando dormimos. “Dios es nuestro refugio y fortaleza…” (Salmo
46.1)
Niños, solo aquellos que guardan la promesa,
temen y practican la Palabra de Dios, estarán protegidos. El Señor Jesús
guardará aquel que fuere fiel. La Biblia nos habla de los siervos de Dios que
fueron ejemplos de fidelidad y demuestra como fueron protegidos del
peligro por haber sido fieles a Dios. Entre ellos destacamos a Daniel. ¿Vamos a
conocer un poco más sobre el libramiento que él recibió de Dios? Escuchen con
atención.
Daniel era un joven fiel a Dios. Por su inteligencia y conocimiento, él
fue uno de los escogidos para servir al rey Darío. Entre todos los presidentes
y príncipes, Daniel se destacaba. En él no se encontraba ningún error y, por su
grande sabiduría y por los servicios prestados a la nación, el rey Darío
pensaba en darlo autoridad sobre todo el reino.
Movidos por los celos, los presidentes y príncipes buscaban algún medio
en que pudiesen perjudicar a Daniel; pero no encontraban nada contra él, porque
él era fiel, y no se encontraba da de malo en él ni culpa.
No satisfechos, los príncipes y presidentes convencieron al rey a que
cree la siguiente ley: “Durante treinta días, aquel que hiciese pedido a
cualquier otro dios o cualquier hombre, y no del rey Darío, sería lanzado en la
cueva de los leones”. Y así encontrarían un motivo para perjudicarlo.
Daniel como un siervo fiel, oraba tres veces al día, se arrodillaba, y
daba las gracias delante de su Dios. Los consejeros del reino vieron a Daniel
orando y lo llevaron hasta el rey. Entristecido con el hecho de que lo querían
perjudicar, y no pudiendo volver atrás en su palabra, el rey Darío ordenó que
Daniel fuese lanzado en la cueva de los leones.
Preocupado, el rey le dijo a Daniel: “Tú Dios, a quien tu continuamente
sirves, Él te librará” (Daniel 6.16).
Entristecido, el rey volvió al palacio, pero no consiguió dormir
pensando si el Dios de Daniel lo libraría de los leones. Al amanecer, el rey
Darío fue hasta la cueva y encontró su siervo vivo y le dijo: “Mi Dios envió su
ángel, y cerró las bocas de los leones…” (Daniel 46.1).
El rey Darío, viendo esta maravilla, escribió un nuevo decreto
anunciando que, en todo su reino, los habitantes deberían adorar al Dios de
Daniel, porque Él salva, libra, y opera señales de maravillas en el cielo y en
la tierra.
CONCLUSIÓN
Del mismo modo que Dios protegió Daniel en el pasado, Él protegerá
aquellos que creen, temen y Lo buscan de todo corazón. Niños, Dios está siempre
listo para protegernos de los peligros y de todos los males. “Dios es nuestro
amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia.”
(Salmos 46.1)
CHARLA DIVERTIDA
Educadora, para esta actividad tú necesitarás de tiras y hojas de papel,
lápiz de color, globos y caramelos para toda la clase.
Formule preguntas de acuerdo de la lección, enrósquelas adentro de los
globos. Prenda los globos en la pizarra o en la pared formando la frase: Dios
es nuestro refugio y fortaleza.
Pida para los niños para que vayan al frente,
exploten los globos, responda la pregunta. Después distribuya las hojas para
toda la clase y pida para que cada una de ellas cree un dibujo de acuerdo en el
versículo del texto (Espere la participación).
Al final de la
actividad, ellos deberán presentar y explicar el significado del dibujo para
toda la clase. Exponga los dibujos en el mural y distribuya los caramelos para
la clase,
Concluya haciendo una oración con
la clase pidiendo a Dios para que estemos siempre seguros de la presencia de
Él.
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