9 jun 2016

Todo Es Posible

La fe nos da acceso a lo que aún no vemos.

La fe nos da acceso aquello que aun no vemos. Tal vez lo que usted ve sea lo contrario de lo que usted está esperando que acontezca. Pero si usted mantiene su convicción en aquello que usted aún no está viendo se tornara realidad, va acontecer.
¿Pero cómo mantener la fe,si todo el día oímos cosas horribles?las noticias son negativas, las cosas que suceden a veces son totalmente diferentes a lo que esperamos, muchas personas dicen que la situación no va cambiar y aún con la sensación de que todo va empeorar.
¿Cómo nuestra fe puede estar firme para vencer lo que vemos, oímos y sentimos?
Nuestra fe es nuestra fuerza, y sólo se adquiere por el oír la Palabra de Dios en la inspiración del Espíritu Santo. Así que cada día hay que buscar esta fuerza. ¿Cómo? Traer esta Palabra a nuestro día a día. Por lo tanto: leer la Biblia todos los días, tratando de entender lo que está escrito. No es necesario leer muchos versículos, lo importante es entender lo que se lee.
Si no entiende, ore pidiendo a Dios entendimiento, lea nuevamente, procure saber el significado de las palabras que usted no conoce, si tiene alguna duda, pregunte a la educadora en la EBI. Poco a poco va quedar más claro para usted.
No porque eres un niño que no es necesario conocer la Palabra de Dios. Por el contrario, cuanto más pronto usted sabe y entiende, menos problemas tendrá en su vida.
El testimonio más bonito es de aquellos que nunca necesitaron ir al mundo a sufrir para conocer al Señor Jesús. Usted entenderá el sufrimiento de aquellas personas conversando con ellas cuando usted crezca, no necesita sufrir por lo que ellos sufrieron.
Aprenda con el error de otros, para no errar también. Todo el mundo que hoy está en la presencia de Dios le hubiera gustado tener la oportunidad de entender la biblia en la infancia, para no perder el tiempo que perdieron.

Ejemplo:

La Resurrección de la Hija de Jairo


La sugestión es montar un escenario completo con todos los que son mencionados en aquella casa...
Sí la casa de Jairo, él y su esposa lloraban por su hija que acababa de morir.
Pero como para Dios Todo es Posible, el Señor Jesús vino para cambiar la situación.

Referencia MARCOS 5:21-23 y 5:35-43



















Pasando otra vez Jesús en una barca a la otra orilla, se reunió alrededor de él una gran multitud; y él estaba junto al mar.
Y vino uno de los principales de la sinagoga, llamado Jairo; y luego que le vio, se postró a sus pies,
 y le rogaba mucho, diciendo: Mi hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para que sea salva, y vivirá.
 Fue, pues, con él; y le seguía una gran multitud, y le apretaban.
  Mientras él aún hablaba, vinieron de casa del principal de la sinagoga, diciendo: Tu hija ha muerto; ¿para qué molestas más al Maestro?
 Pero Jesús, luego que oyó lo que se decía, dijo al principal de la sinagoga: No temas, cree solamente.
 Y no permitió que le siguiese nadie sino Pedro, Jacobo, y Juan hermano de Jacobo.
 Y vino a casa del principal de la sinagoga, y vio el alboroto y a los que lloraban y lamentaban mucho.
 Y entrando, les dijo: ¿Por qué alborotáis y lloráis? La niña no está muerta, sino duerme.
 Y se burlaban de él. Mas él, echando fuera a todos, tomó al padre y a la madre de la niña, y a los que estaban con él, y entró donde estaba la niña.
 Y tomando la mano de la niña, le dijo: Talita cumi; que traducido es: Niña, a ti te digo, levántate.
 Y luego la niña se levantó y andaba, pues tenía doce años. Y se espantaron grandemente.
 Pero él les mandó mucho que nadie lo supiese, y dijo que se le diese de comer.

 Marcos 5:21-23 y 5:35-43

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