“¿Podrá alguien esconderse donde Yo no pueda verlo? ¿Acaso no Soy Yo el Señor, que llena el Cielo y la Tierra?” Jeremías 23.24 – RVC
No hay manera de esconderse de Dios. Él es Omnipresente, o sea, puede estar en todos lados al mismo tiempo.
Él
no está hecho de la misma materia que nosotros. De la misma manera que
podemos ver todo lo que está dibujado en una hoja de papel, Dios puede
ver todo lo que ocurre en el mundo.
El universo, para Él, es como una hoja de papel para nosotros. Nada está escondido.
Por
eso, tenemos que estar atentos a todo lo que hacemos. No pienses que
podés esconder lo que hiciste de incorrecto. Él sabe si te dejaste
influenciar por cosas malas que hacen o dicen tus amigos.
Él
es omnisciente, es decir, Él sabe todas las cosas. Tiene acceso a
nuestros pensamientos y a nuestro corazón. Por eso, cuando vayas a
hablar con Él, sé muy sincero. Muy sincero, realmente. Porque Él ya sabe
lo que pensás y solo quiere ver tu sinceridad hacia Él.
Nosotros,
que somos de Dios, tenemos que vigilar lo que decimos en la escuela, en
casa y entre amigos. Debemos apartarnos de las confusiones, las peleas y
de todo aquello que sabemos que no agrada a Dios. Él es justo, entonces
tenemos que apartarnos de todo lo que es injusto e incorrecto, para que
seamos más parecidos a Él.
Y
si eso es muy difícil, no hay problema. Basta que realmente quieras
hacer las cosas correctamente y buscar en Dios la fuerza para hacer lo
que no estás logrando hacer solo. Porque además de omnisciente (saber
todo) y omnipresente (estar en todos lados), Él también es omnipotente
(tiene todo el Poder).
Pero
Dios no juega a los títeres en este mundo. No somos Sus robots. Él
tiene Poder, pero no usará ese Poder en contra de nuestra voluntad,
porque Él nos respeta. Entonces, si necesitás que Él actúe, tenés que
pedírselo y darle el control de tu vida.
Las
personas no hacen eso en el mundo. Ellas quieren que Dios actúe en sus
vidas, pero no quieren entregarle sus vidas a Él. Ellas quieren
continuar hablando mal de los demás, peleándose, traicionando y
mintiendo y piensan que Dios debería usar Su Poder aunque ellas estén
lejos de Él. Pero Él no es así.
Si
las personas Lo conocieran sabrían que es una regla que Él mismo hizo:
solo usar Su Poder en favor de aquellos que Lo buscan queriendo cambiar.
Dios tiene Poder para transformarte.
Si
te ves con muchas incapacidades, complejos y debilidades, Dios tiene el
Poder para transformarte. Y más: Él quiere hacer que te transformes en
un ciudadano de Su Reino. ¿Recordás que hablamos el mes pasado sobre el
amor de Dios? ¿Recordás que dijimos que Adán y Eva fueron hechos para
vivir para siempre con Dios, en el Jardín del Edén?
Ellos
tenían todos los árboles del Jardín a su disposición y Dios separó solo
un árbol para Él y dijo que no debían tocarlo. Aun así ellos
prefirieron oír la sugerencia del diablo y comieron el fruto del árbol,
obedeciendo al diablo y desobedeciendo a Dios. Así, le entregaron la
autoridad sobre sus vidas y sobre la tierra al diablo.
De esa forma, el hombre quedó como secuestrado por el pecado, hasta que Jesús pagó el precio de su rescate: con Su propia vida.
Él dio Su propia vida por la nuestra. De esa forma, volvimos a tener el derecho de vivir para siempre con Dios en el Paraíso.
Pero,
mientras vivamos en este mundo, necesitamos actuar de una manera que
tenga que ver con la de un hijo de Dios. Para mantenernos a Su lado, no
podemos actuar como las personas de allá afuera.
Por eso, Él nos da la oportunidad de nacer de nuevo.
Pero, ¿cómo “nacer de nuevo”?
¿Entrar al vientre de la madre y nacer otra vez?
No, el nuevo nacimiento no tiene que ver con el nacimiento del cuerpo, sino con el nacimiento interior.
Dios hace todo nuevo, Él hace de vos una nueva persona por dentro.
Pero,
¿cómo es eso? Si Le pedís eso y buscás el nuevo nacimiento, cambiás por
dentro. Tus deseos van a ser buenos, tus voluntades, tu comportamiento,
tus pensamientos... ¡Incluso tus intereses van a ser los mejores!
No
tendrás más deseos de mentir. Vas a lograr controlarte y no harás cosas
incorrectas. Tu motivo para vivir va a ser agradarlo. Vas a tener una
razón para vivir y serás una persona mucho mejor que ayudarás a los
demás.
Las
personas van a mirarte y verán que hay algo diferente en tu manera de
ser. Y en tu interior tendrás paz, serás feliz y vas a compartir los
pensamientos de Dios. El nuevo nacimiento cambia incluso la forma de
entender el mundo. No mejorás, te transformás.
Es
la manera que Dios inventó para hacer que nosotros nos acerquemos más a
aquello que Él planeó para el ser humano en el comienzo. Inclusive
porque para tener un Amigo que tiene todo el Poder, sabe todas las cosas
y está en todos lados, necesitamos tener intereses correctos y deseos
justos porque todo ese Poder solo está al servicio del bien.
Dios está a tu lado y quiere hacerte una persona mejor.
Entonces, ¡las cosas se vuelven mucho más interesantes en la vida!
Porque descubrís que estás al lado de un Dios omnipresente, omnisciente y omnipotente.
¡Orás
a un Dios así, que está en todos lados, que sabe todo y que tiene todo
el Poder! Y Él está a tu lado queriendo ayudarte a crecer y a
desarrollar tu interior, haciendo que nazcas de nuevo y siendo una
persona nueva, mucho mejor de la que sos hoy.
Mientras
el diablo solo quiere acusarte y decir que nada en tu vida va a
funcionar, Dios quiere transformarte, haciendo que tus principales
características se vuelvan grandes cualidades para luchar en esta guerra
por la salvación de otras personas.
Él
ve en vos a un guerrero, un hijo valiente que podrá ser muy útil y muy
importante para ayudar a otras personas que hoy piensan que no tienen
salvación.
Vos
tenés a ese Dios como tu aliado, pero, para que eso realmente funcione
en tu vida, tenés que aliarte a Él. Si hacés un pacto con Él hoy, serás
una de las pocas personas del mundo que aceptaron seguir por ese camino.
Los
escogidos son pocos, y se hacen escogidos. Ellos aceptaron el llamado y
decidieron hacer lo que sea necesario para mantener ese Pacto con Dios.
Vos tenés esa oportunidad hoy y Dios está solo esperando tu decisión
para entrar en tu vida y ser tu socio.
CONCLUSIÓN:
A
todo lugar que vayas, Él está presente. Todo lo que digas, pienses y
hagas, Él lo ve. Y lo que necesitás cambiar para mejor, Él tiene el
Poder para transformarlo, dándote un nuevo comportamiento, el nuevo
nacimiento. Hacé un pacto con Él.
Observaciones para las tías:
- Hacerles
preguntas a los niños (las que colocamos a continuación son sugerencias
que pueden ser usadas, pero la tía, que conoce a los niños y está con
ellos en el momento de la clase, puede – y debe – crear sus propias
preguntas relacionadas al tema, para interactuar mejor con ellos y
hacerlos pensar, aplicando su propia vida a lo que oyeron).
- Pedir
testimonios (es importante que los niños vean el resultado de lo que ha
sido predicado. Al igual que el pastor muestra los testimonios de
transformación de vida, es importante que la tía muestre también
testimonios. Converse con los niños y vea lo que esas enseñanzas han
hecho en la vida de ellos. Usted se sorprenderá y el Espíritu Santo
orientará su trabajo).
Preguntas:
1- ¿Cómo ves a Dios?
2- ¿Cómo te comportás en todos los lugares a los que vas?
3- ¿Ya experimentaste el Poder de Dios en tu vida y familia?
Tías,
Educadoras y Consejeros: Comparen las respuestas de los niños y de los
Teens según el ejemplo de las siguientes respuestas.
Mejor Respuesta:
1- Que Él está presente en todo lugar, y nadie puede huir de Su Presencia.
2- Dios sabe todo, ve lo que hago y siempre sabe cuál es mi intención.
3- Sí, Él tiene Poder para curar y salvar.
Contá tu experiencia con el Poder de Dios.
¿Qué
cambió en vos desde que descubriste cómo es Dios? (Esa pregunta debe
ser hecha a lo largo del mes, después de que el niño haya asistido a
algunas clases sobre el tema.)
Nota: Interactuar con los niños y los Teens, según las respuestas. Pedirle dirección al Espíritu Santo.
Los temas son mensuales, pero las tías y los consejeros deben enriquecerlos con ejemplos diariamente.
Frases clave para dirigir la clase de los niños menores:
Dios sabe todas las cosas – es omnisciente
Dios está en todos lados – es omnipresente
Dios tiene todo el Poder – es omnipotente
Entregale tu vida a Dios para que Él pueda usar Su Poder en tu favor.
Dios tiene Poder para transformarte.
Dios hace de vos una nueva persona por dentro.
El Poder de Dios solo está al servicio del bien.
Dios está a tu lado y quiere hacer de vos una persona mejor.
Vos podés ser un guerrero contra el diablo.
Hacé un pacto con Dios para tenerlo como tu aliado.
Sé un escogido.