“Al fijarse, vio que la zarza ardía en fuego, pero la zarza no se consumía. Entonces Moisés se dijo; Iré ahora para contemplar esta gran visión, porque la zarza no se quema. Cuando el Señor vio que él iba mirar, lo llamó de en medio de la zarza: -¡Moisés, Moisés!
- Aquí estoy – respondió él. Dios le dijo: - No te acerques; quita el calzado de tus pies, porque el lugar en que tú estás, tierra santa es.” (Éxodo 3:1 al 5)
¿Todos ustedes conocen la Historia de Moisés verdad?
El era príncipe, pero su pueblo sufría en el Egipto, El fue escogido por Dios para liberar a su pueblo de la esclavitud. Pero para eso; él tenía que dejar toda su riqueza y comodidades para sacrificar a Dios, llevando con el también el pueblo para sacrificar. Ellos no podían apoyarse en nada que no fuera la Fe en Dios.
Por eso Dios dijo a Moisés allá en el MONTE SINAÍ:
- No te acerques; quita el calzado de tus pies, porque el lugar en que tú estás, tierra santa es. La sandalia hoy representa aquello que estamos apoyados: Ya sea un bien material, un familiar, u otra cosa que impide uno a conquistar las Promesas prometidas por Dios. Para mirar su gran Maravilla, es necesario quitar la sandalia, o sea aquello en que estamos apoyados.
Solo miramos la maravilla de Dios cuando dependemos y apoyamos en Él solamente. Para subir al Monte Sinaí y recibir la realización de nuestros sueños, Debemos poner toda nuestra fuerza y quitar la sandalia de nuestros pies.
0 comentarios:
Publicar un comentario